Aunque este año experimentaron una leve caída, los antiácidos siguen
manteniendo un protagonismo atractivo dentro de las ventas de medicamentos.
Las ventas en farmacias de productos destinados a combatir la acidez se mantienen relativamente estables, en torno a los 25 millones de unidades anuales. Concretamente, en los doce meses a octubre de este año, se vendieron 25,7 millones de unidades. Eso significó 73.000 millones de pesos en facturación, según datos de IQVIA (un incremento de casi 108% sobre el año anterior).
El precio promedio de los productos antiácidos en octubre de este año fue de 2.847 pesos, lo que implicó una suba de casi 75% en relación al mismo mes del año pasado.
Un factor que explica la existencia de una demanda importante, es el hecho de que el 23% de los argentinos mayores de 18 años manifiestan sufrir acidez al menos una vez por semana, según el Ministerio de Salud de la Nación.
En lo que hace a la composición de las ventas, el 83% (en unidades) lo ocupan los inhibidores de la bomba de protones (omeprazol, esomeprazol, y en menor medida, el pantoprazol).
El 76% de la demanda en unidades corresponde a medicamentos recetados. Si se la mide en pesos, el segmento ético tiene un peso todavía mayor: representa el 92% de la facturación.
Un consejo a la hora de asesorar: sólo el 40% de las personas con reflujo gastroesofágico crónico consultan al médico. El resto se automedica. Hay que concientizar a ese tipo de pacientes sobre la importancia de visitar a un médico clínico o a un gastroenterólogo.