El cambio de clima suele afectar al cabello, lo que genera una oportunidad para promover rutinas de cuidado acordes a las tendencias locales y globales. A continuación, se describen cinco tendencias para este año que conviene tener en cuenta para maximizar las ventas de productos de cuidado capilar.
1. Las ventas siguen una tendencia positiva. Luego de la caída registrada durante la pandemia, las ventas de la categoría de cuidado del cabello vienen creciendo año tras año. Pese a la recesión, los pronósticos para este año y el próximo son positivos.
2. El consumo per cápita se mantendrá alto. Distintos factores culturales hacen que en Argentina, la frecuencia de lavado de cabello (y por ende, el consumo anual de shampoo por persona) estén al tope del ranking mundial.
3. La sustentabilidad será un impulsor importante. Se impone el concepto de clean beauty (belleza limpia), que prioriza los ingredientes que no sean testeados en animales, libres de cualquier sospecha de toxicidad, naturales y eco‑friendly. El 23% de las mujeres de entre 35 y 44 años declara otorgar prioridad a ese tipo de productos.
4. El canal online continuará ganando participación. En 2021, las ventas de cuidado capilar por Internet representaban el 5,4%. A partir de allí iniciaron un fuerte proceso de crecimiento. Se calcula que hacia el año 2026 superarán el 14%.
5. La skinificación seguirá avanzando. La pandemia dio tiempo a la experimentación, lo que acentuó el proceso de skinificación: cuidar al cabello como se cuida a la piel. Sérums, peelings, tónicos, mascarillas y ácido hialurónico, hoy tienen versiones para el pelo. En 2022, estas subcategorías representaron el 3% de las ventas. Se estima que en 2024 llegarán al 6%.
Claves para una adecuada exhibición
En primer lugar, los productos de cuidado del cabello se deben agrupar por precio, de mayor a menor, siguiendo el sentido de circulación de los clientes.
Luego, hay que agruparlos por bloque de marca. Dentro de cada bloque se debe dividir a los productos por tipo de cabello (normal, seco, graso, etc).
A su vez, dentro de cada tipo de cabello, se debe exhibir el rango completo de productos, en el siguiente orden, de izquierda a derecha: shampoos, post‑lavado, acondicionadores y, finalmente, todo el resto de la gama (crema de peinar, tratamientos, sérums, ampollas y demás).
En lo que hace a la organización vertical, dentro del espacio destinado a cada marca, las presentaciones más voluminosas deben ir en los estantes superiores, para ir bajando. Eso asegurará que los formatos más grandes sean los más visibles.
EN SÍNTESIS La cultura local promueve el lavado constante del cabello, lo que asegura una buena base. Si la misma se enriquece con un surtido que responda a las tendencias globales y una gestión profesional de la categoría, las ventas se pueden incrementar notablemente.