- El rol potenciador de la tecnología
- Una farmacia con visión de futuro
Las numerosas ventajas que aportan los sistemas automatizados de preparación de pedidos motivaron a esta farmacia mendocina a incorporar robots en dos de sus sucursales.
La aceleración de los procesos de transformación y digitalización que se manifestó a partir de la irrupción de la pandemia, fomentó la incorporación de sistemas robotizados de preparación de pedidos, como los que ofrece la empresa alemana BD Rowa Technologies, líder en procesos gestión de medicamentos. Hoy hay casi 60 robots (entre los que ya están operativos y los que se encuentran en proceso de instalación) en distintas regiones del país.
Farmacia Mori, de Mendoza, dio un paso más: ya cuenta con dos robots funcionando. El primero lo instalaron hace unos meses en la sucursal número 5 (Arístides Villanueva 331), que fue previamente remodelada. Y el segundo comenzó a funcionar a principios de noviembre, en la sucursal ubicada en el Centro Comercial Dalvian de la capital mendocina. En este caso, la instalación fue todo un desafío, ya que implicó cambiar por completo el layout.
¿Qué motivó la decisión de realizar semejantes inversiones? “Supimos que otras farmacias estaban instalando robots, y el tema nos comenzó a interesar. Droguería del Sud nos contactó con Automatiza, la empresa que representa a Rowa, y decidimos avanzar”, comenta Héctor Mori, titular y fundador de la farmacia. “Los resultados nos dieron la razón. Los robots hacen más rápidas las compras de los clientes; liberan a nuestro personal de tareas rutinarias y tediosas, y nos permiten gestionar adecuadamente nuestro capital más importante: la mercadería en stock”, comenta el entrevistado. Además, agrega, los robots son muy vistosos y generan curiosidad en el público, lo que brinda un atractivo extra.
Cualquier temor que pudiera existir entre los colaboradores, desapareció durante la capacitación previa a la instalación. “El robot no compite con el personal. Por el contrario, es una herramienta de apoyo al mostrador, que ayuda a mejorar la gestión”, explica el entrevistado.
El rol potenciador de la tecnología
La decisión de invertir en dos robots en el marco de un contexto económico adverso, y en plena pandemia, fue posible gracias a una firme creencia en el rol potenciador de la tecnología. “Estamos siempre dispuestos a incorporar nuevas herramientas para lograr que nuestro trabajo sea más fluido, eficiente y beneficioso para los clientes que día a día confían en nosotros”, señala Mori.
La situación que se generó a partir de la irrupción del Covid-19, no fue nada sencilla. Si bien Mendoza no fue una de las provincias más afectadas, hubo que implementar numerosos cambios operativos que requirieron un gran esfuerzo en todo el plantel. Esto, lejos de frenar los planes de modernización de Farmacia Mori, terminó siendo un incentivo adicional: “El robot nos brinda una mayor seguridad sanitaria, ya que evita todo tipo de manipulación de los medicamentos entre el momento en que ingresan y son entregados a nuestros clientes”, explica Mori.
“Es una lástima que la situación económica actual no permita una mayor masificación en el uso de esta tecnología. Pero creemos que hacia allí va al futuro, y si no fuera porque el entorno nos exige cierta cautela en lo financiero, nos encantaría sumar ya mismo más robots en otras sucursales”, concluye el entrevistado con entusiasmo.
Una farmacia con visión de futuro
Farmacia Mori cuenta hoy con once sucursales en las localidades de Mendoza, Guaymallén y Godoy Cruz. Fue fundada en 1978 por Héctor
Fernando Mori y su esposa, Angela Valentini. Con el apoyo de sus hijos, forjaron los cimientos en los que hoy se sustenta su gestión: “El respeto por los clientes, basado en una atención cálida y profesional, y la constante preocupación por mejorar su calidad de vida”, explica Mori. “Así, logramos posicionamos como una farmacia emblemática de Mendoza”.