Las farmacias pueden exhibir distintos productos de venta libre destinados a complementar las dietas que buscan prevenir o controlar patologías cardíacas.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en nuestro país; representan el 28% del total de fallecimientos, según datos del Ministerio de Salud de la Nación. Si bien los tratamientos disponibles para este tipo de problemas avanzan aceleradamente, la mejor política es la prevención, que se clasifica en dos tipos.
■ Primaria: cuando el individuo no tuvo ningún evento cardiovascular, y se busca minimizar la posibilidad de ocurrencia.
■ Secundaria: cuando la persona ya padeció un accidente cerebrovascular, un infarto o una obstrucción de alguna arteria. Es decir, cuando ya existe un daño evidente y se busca evitar que se profundice.
En ambos casos, además de evitar factores de riesgo (como sedentarismo, obesidad, tabaquismo y estrés excesivo) la alimentación cumple un rol clave, que puede ser complementado con una apropiada suplementación. Las farmacias cuentan con varios productos de venta libre y exhibición permitida que representan un importante aporte en ese sentido.
Por ejemplo, Natufarma ofrece el Aceite de Pescado Omega 3, que gracias a su acción antiagregante plaquetaria, contribuye a evitar coágulos y favorece la vasodilatación vascular. Otra alternativa es Chía Omega-3, de Bagó, un suplemento de origen vegetal muy demandado, que ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos.
Por su parte, Chiacaps Premium Oil, de Elea, garantiza una fácil ingesta, al presentarse en cápsulas blandas, y una óptima conservación. Está elaborado en base a aceite de chía.
Omega 3
Cada vez hay más evidencias de que los ácidos grasos Omega 3 reducen la incidencia de infartos de miocardio y, entre las personas que ya han sufrido
uno, disminuyen la probabilidad de reiteración. Además, ayudan a controlar el colesterol, la presión arterial y los triglicéridos. Se encuentran sobre todo en el pescado y en algunos vegetales, como la chía.